Cobertura De Charla Grasas Saludables
Hospital del Valle siempre está educando y orientando en la salud y el bienestar de nuestros pacientes, el Dr. Jorge Suazo especialista en Gastroenterología nos habla acerca de las grasas y el aparato digestivos y nos explica cómo afectan estas grasas a nuestro cuerpo.
¿Porque es necesario consumir las grasas? Porque es un componente crítico que envuelve las células y es necesaria para sintetizar las hormonas esteroideas. También es importante para una absorción adecuada de vitaminas liposolubles que deben consumirse en la dieta. Por lo tanto, si la ingesta de grasas en la dieta es muy ilimitada, puede resultar problemas para la salud.
La grasa es un nutriente más denso en energía, en comparación a los carbohidratos y proteínas. Por otro lado muchas grasas en la dieta pueden provocar obesidad, inflamación y un mayor riesgo de enfermedades crónicas. Así lo explicó el Dr. Suazo.
Las consecuencias de la obesidad son el colesterol elevado, presión alta, ácido úrico elevado, niveles de glucosa elevados, daños a tejidos por inflamación y acumulo de grasas por el hígado. Por otro lado, la obesidad está asociado a cánceres como ser de; hígado, ovario, colon, riñón, endometrio, páncreas, entre otros.
El Dr. Suazo menciona, que las grasas que no ayudan a nuestro cuerpo son las grasas saturadas, las cuales provienen principalmente de fuentes animales (carnes, lácteos, yemas de huevo), aunque ciertos aceites vegetales como el de coco y de palma también son ricos en ellos. También existen grasas que consideramos “buenas”, estas son las grasas monoinsaturadas, estas se encuentran en aceite de oliva y canola, nueces, semillas y aguacates. Otro tipo de grasas son las polinsaturadas las cuales se encuentran en aceites vegetales como aceite de soya, girasol, maíz y cártamo. Por último, las esenciales, como ser; linaza, semillas de calabaza, nueces y aceite de canola, y en peces marinos de agua fría (salmón, sardinas, arenque y atún).
Sabemos que las grasas retrasan el vaciamiento del estómago y algunos pacientes se quejan de sensación de pesadez al consumir alimentos grasos. No hay evidencia que apoye disminuir el contenido de grasa en pacientes con reflujo, no hay estudios que específicamente evalúen el impacto de la disminución del contenido de grasas en la dieta. Sin embargo, su consumo puede empeorar los malestares por sensibilización. Por otro lado, las grasas se digieren y absorben en el intestino, las enfermedades que provocan daño intestinal interfieren con la absorción de las grasas y el exceso de grasas puede producir diarrea.
Con las enfermedades de la vesícula y grasas, la bilis que se produce en el hígado, sirve para la digestión de grasas. Cuando consumimos grasas se produce una sustancia llamada colecistoquinina que estimula de manera potente la contracción de la vesícula. Una persona con piedras en la vesícula puede tener dolor por ingerir grasas. Algunos pacientes que tienen el síndrome de intestino irritable sufren malestares al ingerir grasas, sin embargo no se han demostrado una intolerancia generalizada. El alto consumo de grasas se relaciona al desarrollo de pólipos del colon y al cáncer de colon.
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